La Selección Colombia y el ‘fantasma’ de Pasadena

Como en Pasadena - California… Sí, me acordé de aquel triste debut de la Selección Colombia en el Mundial de 1994, donde tras llegar como el gran favorito al título  en un grupo con Rumania, Estados Unidos y Suiza, la ‘Tricolor’ terminó perdiendo los dos primeros partidos y quedó eliminada en primera ronda en un hecho que para los colombianos significará siempre un fracaso deportivo y una tragedia de vida por el asesinado del defensor Andrés Escobar, luego de su recordado autogol.

El inicio del combinado patrio en Rusia 2018 fue tan parecido a lo ocurrido en el estadio Rose Bowl en aquellos años 90’s. En las horas previas estuvo lleno de triunfalismo excesivo por parte de la hinchada colombiana, y gran parte de la prensa del país, que sentenciaba una goleada 4-0 a los japoneses. A diferencia de USA 94, los jugadores no estaban confiados y no llegaban al Mundial con el rotulo de ‘candidato al título’, pero sí con un claro favoritismo frente a los nipones.

Un mar de nervios inundó a los futbolistas desde los actos protocolarios. La primiparada de muchos en una Copa del Mundo les pasó factura y a la postre hizo que el cuadro japonés aprovechara el error defensivo que terminó sacando a la ‘Tricolor’ del compromiso en los primeros minutos del partido, tras la mano imprudente de Carlos Sánchez dentro del área.

Luego se empató, pero no hubo reacción del cuerpo técnico para conservar el resultado o inteligentemente ir por un triunfo teniendo en cuenta que Colombia se encontraba con un jugador menos. Los minutos pasaron y las caras tristes de varios hinchas presentes, unos con lágrimas en los ojos, me hicieron acordar a lo vivido aquel 18 y 22 de junio de 1994, donde se perdió una linda generación de futbolistas colombianos que pudo haber hecho historia.

Esa primera derrota ante Rumania 3-1 fue decisiva para perder el segundo partido frente a Estados Unidos: mentalmente el equipo quedó hecho trizas tras caer ante los rumanos y no se pudo levantar para el segundo compromiso; además, históricamente cuando Colombia pierde en su debut termina quedando eliminada en primera ronda (Chile 62, USA 94 y Francia 98).

Yo solo espero que aquel 'fantasma de Pasadena' quede en el pasado, que no nos acordemos del Mordovia Arena  en un futuro o del estadio de Kazán donde jugaremos ante Polonia. Pero lo que más deseo es que esta generación no se pierda como sí pasó con la de los años 90’s.