¿Hasta dónde tenemos derecho a criticar?
El mediocampista de Millonarios está inmerso en una difícil polémica debido a una riña familiar.
Los últimos días no han sido los mejores para el jugador colombiano Fredy Guarín, lamentablemente es su vida personal y no futbolística lo que lo ha puesto en el ojo del huracán, en el centro de una polémica en el que todos nos creemos con el derecho a entrar sin preguntar porque.
Futbolísticamente fui uno de los que dije que su contratación por parte de Millonarios era un error, porque mirando su antecedente hacía mucho no jugaba y Millonarios necesitaba una figura para mostrar pero para ya y eso no sucedía.
Ya contratado, el jugador debutó ante Envigado y su figura no se parecía en nada a la de Boca Juniors ni de Inter de Milán, parecía más a la de un jugador veterano y retirado del alto rendimiento.
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Luego el mismo lo contó en su cuenta de Instagram que estaba pesando 105 kilos y que tenía que rebajar mínimo 15 y entonces yo pregunté donde está el técnico, preparador físico, el cuerpo médico del equipo que permitía semejante exabrupto. Era una vergüenza que eso sucediera en un equipo que se llama grande y emblemático de nuestro fútbol.
Su deseo por ponerse a tono físicamente le pasó factura y al volver su cuerpo le pasó factura. Hasta ahí mi crítica, porque es mi deber, como jugador todo le salió mal.
Pero lo que ha pasado esta última semana hace parte de su vida personal, quienes somo nosotros y qué derecho tenemos para criticar lo que ha sucedido, no sería mejor esperar y sobre todo respetar su momento, quien sabe que está pasando por la cabeza de Guarín, quién conoce sus problemas personales o familiares para señalarlo como culpable de algo que no conocemos.
Es el momento para apartarnos y quienes lo conocen y hacen parte de su entorno lo protejan y lo ayuden. En este momento es más importante el ser humano, el jugador queda en un segundo plano.
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El caso de Guarín es el de muchos deportistas que pasan por momentos difíciles en su vida y a los que les caemos encima en los momentos más difíciles. Nos olvidamos que son personas que en su mayoría vienen de hogares con muchas carencias, que salen a relucir cuando el dinero abunda y no se está preparado para asumir los roles de figuras sin preparación.
Dejémoslo tranquilo no le echemos más carga encima, tal vez su vida hoy es tan pesada que no resiste una carga más.
Fuente
Antena 2