La Vuelta 2019 retoma este miércoles la carrera en Aranda de Duero, tras el día de descanso en Burgos, para enfilar hacia Guadalajara, donde espera un final en cuesta que podría ser el cuarto sprint de esta edición.
Será la jornada más larga de toda la carrera y la única por encima de los 200 kilómetros de recorrido, un total de 219,6 sin puertos puntuables por el camino. Aunque sí hay un alto no puntuable, el de Carrascosa (km.86,4), con la cima a 1.380 metros de altura, que es la dificultad más destacada.
Y al final, según un libro de ruta, tres últimos kilómetros en ligera subida para llegar a Guadalajara. Después de sus triunfos en dos de las tres llegadas masivas que se llevan disputadas, sobre todo el del sábado último en Oviedo, el día parece propicio para Sam Bennett (Bora-Hansgrohe), que ya se impuso en el primero en Alicante.
El joven neerlandés Fabio Jakobsen (Deceuninck-Quick Step), ganador en el segundo sprint en El Puig por delante del propio Bennet; su lanzador, el argentino Maximiliano Richeze, segundo en Oviedo; y el colombiano Fernando Gaviria (UAE Emirates), tercero en El Puig pero sin aparecer en el resto de la carrera; se perfilan sus principales rivales.
17ª etapa de la Vuelta 2019:
Aranda de Duero-Guadalajara (219,6 kms./Llana)
Promedio intermedio previsto: 38 kms/hora
Esprint: Atienza (km.103)
Sin puertos puntuables. EFE