El techo del Tour en una jornada decisiva. La 19ª etapa cuenta con todos los elementos para determinar la jerarquía final de la carrera, el viernes entre Saint-Jean-de-Maurienne y Tignes.
Tres subidas en la Haute-Maurienne, un valle expuesto al viento, que conduce a Iseran, con sus 2.770 metros. Los 12,9 kilómetros (al 7,5 %) de su vertiente sur, han sido pocas veces visitados por el Tour, que ha pasado solo en siete ocasiones por su cima.
El descenso lleva sin transición al ascenso final de Tignes, duro sobre todo en su primera parte. Esta subida de 7,4 kilómetros al 7% concluye con dos kilómetros en ligero falso llano.
"La dificultad es que a los pies, ya estamos a 1.800 metros", señaló Thibaut Pinot, el hombre más fuerte en los Pirineos. "Vamos a medir el efecto de la altitud en el organismo antes de las primeras rampas, estamos a mucha altitud", subrayó.
Tignes recibe al Tour por segunda vez, doce años después de la victoria, a olvidar tras su escándalo de dopaje, del danés Michael Rasmussen, que pocos días después fue sancionado.