Caerán los débiles y ¿los peces gordos cuándo?

Acabo de leer que están diciendo que Yaser Asprilla podría estar en la agenda del Barcelona ¿Cuál agenda? ¿Del Barcelona de dónde? ¿Del Barcelona de España? no tienen un mango, no tienen un peso, están quebrados. Y eso sin contar qué pueda pasar en Champions, si Asprilla quiere un consejo de perro viejo, no se vaya a poner a hipotecar su futuro, como lo han hipotecado un montón de jugadores.

El Barcelona en este momento es el espejito, tiene nombre, no tiene plata y ahí está a punto de quedarse sin nada. No tiene técnico, tiene y no tiene. Y aparte de eso con una investigación de 17 años pagándole una mensualidad al vicepresidente de la Comisión de Árbitros. Entonces qué ni se le vaya a ocurrir a quienes manejan a Yaser, de ponerlo allá porque lo acaban.

Como también, hay una reflexión en torno a esta noticia de Mbappé, que no vaya a ser que el Real Madrid - claro que Florentino Pérez es un hombre muy estructurado, casi que genial, yo diría que en el mundo no hay un dirigente de su talante de su categoría - pero no sobra decirlo, porque ya les pasó, en la época de los galácticos, contrataron genios, y no contrataron quien hiciera el trabajo de marca, de custodia, de recuperación, lo que llaman, mal llamado además, el juego sucio.

Que no se vaya a parecer con la llegada de Mbappé y juntar a Bellingham, con Vinicius, con Rodrigo, con Joselu, con Modric, con este y con aquel, que no vaya a ser como las famosas selecciones del año, la del sindicato de futbolistas, que junta a todos los genios de la pelota, pero que no quitan un bombón en la puerta de una escuela. No se puede perder el equilibrio.

Si lo de Mbappé es maravilloso, con Bellingham, con Vinicius, pues la locura, pero que no se les vaya a olvidar de que alguien tiene que hacer el llamado trabajo sucio. Y que si se va Kroos tiene que venir alguien ahí, esto lo digo pues en términos generales porque este tipo de cosas le sirven a uno para poner ejemplos, que un equipo debe entender que esa frase vieja de que la mejor defensa es un buen ataque, es mentira. Es una frase que se acomoda al tribunerismo, a lo que la gente quiere oír y no, a lo que realmente pasa, lo que realmente sucede.

Los equipos que ganan, los verdaderos campeones en el mundo, parten de un principio que es equilibrar defensa con ataque, en la misma bolsa tiene que estar el equipo que ataca muy bien y el equipo que defiende muy bien y si no pregúntenle a Lucas González. Los equipos que atacan bien necesitan defender bien. Entonces ese cuento de que la mejor defensa es un buen ataque, eso es simplemente recorrer la mitad del camino, es despotricar del equilibrio.

Hay un montón de frases en el fútbol que no son ciertas. Esa, por ejemplo es una, la mejor defensa, es una buena defensa y el mejor ataque es un buen ataque, eso de que las finales no se juegan, se ganan. No, se juegan y se ganan, eso de que un jugador con una sola pierna puede ser más que los demás. Bueno, eso era en el peladero antiguamente, en el fútbol de los años 60's 70's y eso que difícilmente, en el fútbol de hoy, tienes que tener dos piernas, dos cabezas, cuatro ojos, cinco orejas. Sí, porque el fútbol de hoy es absolutamente exigente de lo físico.

No se coman esos cuentos, no se coman esas frases hechas, entonces si, una berraquera que venga Mbappé, pero alguien les tiene que cuidar la espalda o no.