Messi desata locura en Hong Kong: llena estadio durante entrenamiento

Con camisetas rosas del Inter Miami o albicelestes de Argentina, banderolas con el '10' o pancartas en español, miles de aficionados se entregaron el sábado a la Messimanía en Hong Kong durante un entrenamiento abierto del equipo de la MLS.

"Es la primera vez que veré a Messi y estoy muy ilusionado", afirmó Li Weiyi, un estudiante de 17 años llegado desde la ciudad vecina de Shenzhen, en China continental.

"Significa mucho para mí. Él me hizo entrar en el mundo del fútbol, él me hizo amar al fútbol", asegura el joven entusiasmado, luciendo la camiseta del nuevo equipo de su ídolo.

Horas antes del entrenamiento, centenares de aficionados aguardaban frente al estadio, con 40.000 espectadores de capacidad, donde el domingo Messi y compañía se medirán a un combinado de la modesta liga local.

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Aunque la franquicia de la MLS cuenta con Luis Suárez o Sergio Busquets y con David Beckham como copropietario, el gran protagonista fue el ocho veces Balón de Oro, que sembró el pánico al saltar al césped con minutos de retraso.

Casi lleno, el estadio se hundió cuando finalmente se anunció el ingreso del argentino, recibido con un estruendoso "Messi, Messi" al que respondió con un tímido saludo.

"Es el GOAT, el mejor de la historia. Lloré cuando se convirtieron en campeones de mundo", dijo Sally Liu, hongkonesa de 28 años, con una camiseta conmemorando la victoria de Argentina en Catar.

"Ahora está jugando en Miami. No tendré muchas más oportunidades de verlo en el futuro. Es mi última oportunidad", agregó.

La oportunidad fue breve: Messi y Suárez realizaron estiramientos al margen durante gran parte de la sesión, aunque al final se unieron con sus compañeros para pelotear con niños de escuelas locales.

- Hong Kong se tiñe de rosa -

En medio de las preparaciones para el Año Nuevo Lunar, que llena la ciudad de farolillos y decoraciones rojas, el rosa del Inter Miami se abrió camino en carteles y pantallas publicitarios o en los escaparates de tiendas deportivas.

Por la espectacular bahía de esta ciudad de afilados rascacielos, en los últimos días navegó un sampán tradicional chino con el rostro de Messi estampado en las velas de color rosa.

La visita del equipo supone un estímulo para Hong Kong, que busca recuperar su estatus de ciudad internacional de Asia después de años de aislamiento por la pandemia.

Las entradas, con precios de entre 880 y 4.800 dólares hongkoneses (112,5 y 614 dólares estadounidenses), se agotaron en menos de una hora.