En Once Caldas se cansaron de la indisciplina y anuncian medidas

Con el título reciente del Atlético Bucaramanga en la Liga BetPlay, los equipos que no lograron clasificarse a la final o a los cuadrangulares han comenzado a preparar la pretemporada con la vista puesta en mejorar sus resultados en el segundo semestre del año.

Entre ellos, el Once Caldas, que bajo la dirección de Hernán Darío 'Arriero' Herrera, ha iniciado sus trabajos con el objetivo de superar la actuación del semestre anterior.

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El Once Caldas tuvo un desempeño notable en el primer semestre, logrando llegar a las semifinales por primera vez en cinco años. Sin embargo, en los cuadrangulares, el equipo se desinfló y no pudo acercarse a pelear por un lugar en la final. Este descenso en el rendimiento ha sido atribuido, en parte, a problemas de indisciplina dentro del plantel.

Los casos de indisciplina

Según reveló el diario La Patria, periódico más tradicional de Manizales que revela exclusivas del Once Caldas, los casos más notorios de indisciplina involucraron a su goleador Dayro Moreno y a Gustavo Torres.

Se dice que estos incidentes fueron un factor clave en el bajo rendimiento del equipo durante los cuadrangulares. En particular, Gustavo Torres no se presentó a la concentración del equipo antes del crucial partido contra Santa Fe en Bogotá, lo que resultó en su salida del club la semana pasada.

Además, Dayro Moreno llegó tarde a la concentración, aunque no se tomaron medidas inmediatas en su contra debido a la intervención de sus compañeros.

Con el inicio de los entrenamientos para la Liga BetPlay II el pasado lunes, el cuerpo técnico y la directiva del Once Caldas decidieron tomar cartas en el asunto para evitar que estos problemas se repitan. "La palabra más importante en la reunión fue disciplina en todo el sentido de su significado. Pusieron las cartas sobre la mesa y se definieron puntos importantes que se deben cumplir", indicó una fuente cercana al equipo a La Patria. Además, agregó: "Se deben cumplir las reglas, profesionales, personales y familiares".

El anuncio ha sido claro: no habrá más licencias para los jugadores indisciplinados. Las normas establecidas abarcarán tanto el comportamiento dentro del campo como fuera de él, incluyendo aspectos personales y familiares. Esta decisión busca asegurar que el equipo mantenga un nivel de profesionalismo y compromiso que le permita alcanzar sus objetivos deportivos.

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La medida ha sido bien recibida por algunos sectores del club y la afición, que consideran que la falta de disciplina fue un factor determinante en el desempeño irregular del equipo. El Once Caldas ahora enfrenta el reto de integrar estas nuevas reglas y mantener un ambiente de trabajo riguroso y enfocado. Con la Liga II programada para comenzar a mediados del próximo mes, el equipo tiene un corto margen de tiempo para adaptarse a estas nuevas directrices y comenzar la temporada con el pie derecho.

Bajo el liderazgo del 'Arriero' Herrera, el equipo espera no solo mejorar su rendimiento en la cancha, sino también establecer una cultura de disciplina y profesionalismo que le permita alcanzar sus metas y devolver la alegría a sus seguidores.