América sufre en la Liga BetPlay: tendrá que cambiar de sede en el segundo semestre

La espera llegó a su final. América de Cali por fin definió a su próximo director técnico después de la salida de César Farías de la institución escarlata. El adiós del venezolano del club prendió la primera alarma en los directivos para definir al nuevo estratega.

Un viejo conocido como Jorge el ‘Polilla’ Da Silva fue confirmado como el nuevo timonel del América de Cali. Con el uruguayo, se espera que llegue una reestructuración dentro del plantel en busca de volver a ser protagonistas en el torneo y en el segundo semestre de 2024. Pero, la gestión de Da Silva, tendrá varios problemas para afrontar el rentado local por el protagonismo del Mundial Femenino Sub-20.

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La noticia se venía venir, pues del 31 de agosto al 22 de septiembre, Cali será una de las tres sedes del Mundial Femenino Sub-20, certamen en el que 24 selecciones tendrán la oportunidad de ir por la gloria mundialista. La ciudad del Valle del Cauca es considerada como la capital del fútbol femenino en Colombia, por lo cual, el Pascual Guerrero tendrá protagonismo especial.

Y es que, Felipe Montoya, secretario del deporte y recreación de Cali estuvo en diálogo con Antena 2 afirmando la dificultad que tendrán, tanto América masculino como femenino de cara al segundo semestre. Las preparaciones para el certamen mundialista se llevarán a cabo en los meses de julio y agosto, además del desarrollo del torneo en septiembre.

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Felipe Montoya aseguró, “la primera preocupación es el América Femenino, teniendo en cuenta que se tiene que hacer una intervención en el gramado del Pascual. Por otro lado, América ya sabe que el estadio estará cerrado hasta el 25 o 26 de septiembre”. El elenco vallecaucano no podrá hacer las veces de local en su recinto deportivo por poco más de tres meses.

América de Cali tendrá que buscar una nueva casa en Colombia para los meses de julio, agosto y septiembre. El Mundial Femenino pegó fuerte a las aspiraciones escarlatas que deberá cambiar de localía. Palmira podría ser una solución, pero el Francisco Rivera Escobar no cuenta con las dimensiones de un estadio tan gigante como el Pascual.