Santa Fe y las claves que le dieron la clasificación en Copa Sudamericana
Independiente Santa Fe, en la Copa Sudamericana ha encontrado revulsivos que le han dado triunfos. Hay mérito de Sanguinetti.
Independiente Santa Fe logró una importante clasificación a la semifinal de la Copa Sudamericana, la noche del pasado martes en el estadio de Palmaseca ante Deportivo Cali. Es un logro importante para el club rojo de Bogotá, puesto que ha tenido un complicado semestre, consecuencia de lesiones y malos resultados en el torneo local.
El ‘León’ se jugaba el semestre en el certamen internacional, lo sabían el DT, los jugadores y los aficionados. Por ello, ante Cali, Santa Fe mostró otra cara respecto a la Liga Águila; y apeló a su experiencia para conseguir su presencia en las semifinales de la Copa Sudamericana. Hubo tres claves para estar hoy instalado entre los mejores cuatro equipos del torneo.
1. La jerarquía internacional de Santa Fe: Si bien no tiene sus vitrinas copadas de trofeos, Santa Fe ha jugado torneos Conmebol consecutivamente desde 2013, logrando la Copa Sudamericana en 2015, la Suruga Bank en 2016 e instancias importantes de la Copa Libertadores donde pudo doblegar a importantes equipos del continente.
Eso le ha dado a Santa Fe, experiencia y jerarquía para jugar partidos ‘coperos’. Porque esa clase de juegos se juegan de manera diferente; especialmente en condición de visitante, como lo hizo el equipo de Guillermo Sanguinetti en Palmaseca. Y si bien, no están los mismos jugadores de antes, es un ADN y un estilo que ha trascendido técnicos y futbolistas.
2. La rebeldía de sus jugadores: Aunque el ‘León’ no expresa un fútbol vistoso en la cancha, y en ocasiones luce incapaz de vulnerar el arco rival, los jugadores han apelado a su enjundia y rebeldía para luchar los partidos y conseguir resultados.
Lo hicieron en la serie contra Millonarios y en los dos partidos contra el Deportivo Cali: lucharon, corrieron y pegaron como lo indica el manual de la Copa, y de esa forma consiguieron goles en momentos claves de los cotejos para salir victoriosos. Se ve una diferencia marcada cuando el rojo juega la Liga y cuando juega las copas.
3. La fortaleza defensiva y el estilo de juego. Buen visitante: Santa Fe es un equipo extraño. En ocasiones luce torpe e incapaz para generar juego y ganar, también para defenderse. Porque en la Liga ha cedido puntos clave en El Campín, aunque rescata resultados fuera de su patio, pero no es suficiente para el rentado local.
No obstante, en la Copa sí le sirve jugar así. Un equipo que se repliega y copa el medio campo, imposibilitando la generación de su rival. Además, cuando presiona en campo adversario, lo hace de forma ordenada y consigue réditos. Apela al fútbol pragmático y juego aéreo que tanto se le ha criticado, pero que le ha dado resultados importantes. Hay que darle méritos a Sanguinetti, que ha acomodado el equipo de acuerdo a sus limitaciones.
Fuente
Antena 2